Nemo’s

«¡No quiero ser llamado artista!»

¿Como dices?
«Detrás de la palabra artista se esconde una etiqueta social que, a menudo y indiferentemente, tiende a penalizar las otras persona. El artista viene levantado a un nivel superior: a menudo sucede que las personas te traten como si estuvieras haciendo algo sobrehumano. Esto me da vergüenza y no me gusta mucho, porque no soy más especial que otros.»

¿Crees que no tienes un talento en especial?
«Creo que el talento sea exactamente el ser humano. Cada uno de nosotros, cada uno en su propia area, tiene una parte que sobresale. Yo, en comparación a otro, tengo una mayor predisposición a la representación gráfica de una imagen, pero – por ejemplo- no se mucho de fotografía. El punto es que la comparación de las capacidades artísticas, a los otros talentos se les da menos valor.»

Tienes razón, pero ¿hubo un momento en el cual dijiste a ti mismo, “dibujo bien”?
«¡No, no lo he dicho nunca! Aun siento frustración porque creo de no hacer suficiente. Es una cuestión de carácter, que me lleva a una constante búsqueda de mejorarme. Creo que no diré nunca “ este me quedó genial”. A veces me pregunto si este es el camino correcto que pisar y evaluo alternativas respecto a lo que hago actualmente, exactamente por este motivo. Me doy cuenta que es absurdo, pero he sido siempre muy inseguro; el criterio de auto critica es extremo, no tengo piedad con mi mismo y polémico con todo y con todos.»

¿Esta parte de tu carácter viene reflejada en tus personajes?
«Mis personajes no son contentos de ser lo que son, probablemente hay una argumentación freudiana detrás de esto, una parte antropológica compleja. Desde tiempo pienso que en la especie humana ha habido un error evolutivo; en el ser humano el desarrollo cerebral ha sido demasiado veloz respecto a todo el cuerpo. Podemos pensar al infinito o a cosas muy complejas, a veces paradójicas, difíciles de entender completamente porque no podemos vivirlas. Me fascina la posibilidad que tiene el ser humano para hacer las cosas, pero me disgusta la ineptitud que todos nosotros tenemos en no desarrollar, o explotar, nuestros potenciales. Esta consideración esta a la basa de cada personaje que dibujo.»

Pareces muy apasionado a la ciencia.
«Cuando era niño los únicos programas que mis padres me dejaban ver en la televisión eran aquellos científicos, aquí nació mi curiosidad y mi pasión por estos argumentos. La biología y la ciencia permiten descubrir cosas que van mas allá de lo imaginable, mientras la fantasía esta vinculada a la experiencia, de las imágenes, de la cultura iconografía en la cual crecemos y en la cual somos educados. No podríamos nunca imaginar algo que no hayamos visto.»

Hablemos un poco de tus muros, a Messina has realizado uno en el 2015 que es aun muy actual.
«Este trabajo habla de la percepción italiana de la emigración. Las transmisiones televisivas que se concentras sobre este tema suelen profundizar varios aspectos, pero dejando de lado la muerte de estas personas. Entonces me pregunté in que modo nuestra sociedad trataría estos cuerpos, y hasta que punto llegarían. Pensé, entonces, que serian vistos como cortinas mojadas para colgar, porque el único problemas es que están mojadas y por lo tanto deben ser secados, no que hayan muerto.»

Tus personajes están desnudos. ¿Has tenido criticas por esto?
«Exactamente en Messina, un señor reaccionó mal, y se declaró escandalizado y preocupado, porque no habría sabido cómo justificar a su hija las desnudez exhibida. Respecto a la descripción que deseo hacer del ser humano, la desnudez – en su integridad y sin censuras – contiene el concepto de humillación que quiero darle a mis personajes.»

¿Y en New York?
«Este dibujo, lo había pensado para realizarlo cerca de Wall Street pero esa zona tiene pocas murallas, entonces fui a Brooklyn. La idea nace da la unión de dos lecturas: una es el tema del peso del el alma, la otra trata sobre una asociación de voluntarios de NY que se ocupa de identificar a las personas sin hogar. En este segundo articulo contaban la historia de un broker que terminó por vivir en la calle, al cual habían encontrado 21 dólares en su cartera, cuando fue encontrado muerto. De aquí la asociación a los “21g” que se dice que sea el peso de el alma. El nombre del muro es 1 gramo porque, es mas o menos ese el peso de un billete de un dólar. Ademas, un dólar tiene un valor simbólico muy fuerte, así de fuerte que viene usado como un icono y/o imagen sintética. Mi reflexión, por lo tanto nació de la siguiente pregunta: ¿cual es la unidad de medida de nuestra posición social? ¿somos pesados como aquella del dinero?»

Regresemos por un momento a hablar de tus personalidades. Sabemos que eres sensible, pero también eres sensorial: ¿es verdad que coleccionas olores?
«Un olor me recuerda y evoca mucho mas que una fotografía, por eso cada vez que voy a un lugar nuevo, busco un olor nuevo para asociarlo. No debe ser un olor nuevo o típico de la zona, busco un olor que en el futuro representara una postal de ese lugar. En mi casa tengo vario frascos en los cuales conservo estos recuerdos. El olfato desde el punto de vista biológico es el único sentido directamente conectado a la parte mas animal de nuestro cerebro, la parte mas instintiva. Es mas, la memoria olfativa es la única que persiste al infinito.»

¿Tienes algún proyecto a corto plazo?
«Si, primero que nada tengo que actualizar el sitio, esta igual hace mucho tiempo y también debería realizar algunas impresiones en colaboración con Davide de la Mano.»

¿Alguna nueva pared? …aun que no seas un artista.
«¡Naturalmente! Quisiera realizar algunos sobre el tema de la migración.»

© Robby Rent
&
Maria Chiara Wang